Ahora Aristóteles y Kant son machistas

dominación machista

Fuente: Dominación machista

A pesar de encontrarme ahora mismo delante de una pantalla de ordenador escribiendo este artículo, me siento como si estuviese en una mezcla entre el siglo XV y la irrealidad más pura (y dura).

Esta sensación es fruto de mi reciente visita a una cuenta de tumblr titulada “Dominación machista“. Por suerte, me topé con ella gracias a una iniciativa de Change.org para que la página sea eliminada… ¡Y ojalá la eliminen pronto!

He visto comportamientos machistas, comentarios machistas, memes machistas, imágenes machistas, pero esta página los supera pues es un conjunto de todo ello llevado al extremo.

Con un alto contenido pornográfico, “Dominación machista” pretende ser el guía para todos aquellos que quieran practicar una vida machista, casi como si se tratase de una religión. Los administradores lo pintan como una filosofía de vida, eso sí, siempre con consenso entre las dos partes. De hecho, la propia página cuenta con un apartado titulado “Filosofía D.M.” que explica aquello que predican. Por otro lado, también cuenta con otra sección que está al servicio para todos aquellos/aquellas machistas principantes que tengan dudas acerca de cómo ser unos buenos machistas. ¡Qué buenos samaritanos son los administradores! En el apartado de “Filosofía D.M.”, me he encontrado con enunciados tan espectaculares como “Creemos que el hombre es superior a la mujer: Físicamente, emocionalmente, intelectualmente y en todos los aspectos de la vida.“, “Creemos que toda mujer nace con el potencial de ser una gran sumisa pero los medios de comunicación y aberraciones como el feminismo las apartan de su verdadero destino.“, “Creemos que la mujer esta diseñada para ser la propiedad de un hombre sin la capacidad de tomar decisiones de forma individual e independiente.“, “Creemos que es correcto pegarle a la mujer, esto debe hacerse con frecuencia y con severidad dependiendo de los niveles de desobediencia y rebeldía de la misma, esta forma de disciplina nunca debe atentar contra su integridad y salud física pero si debe ser efectiva en corregir comportamientos.” y “Creemos que una mujer no tiene derecho a decidir como sirve sexualmente a su pareja, el hombre tiene derecho a usar su cuerpo cuando decida y como decida siempre y cuando no atente contra su salud e integridad física.“.

Volviendo al tema del consenso entre ambas partes, ahora resulta un poco irónico, ¿no? Es decir, una mujer tiene el derecho a decidir si ser machista o no, pero a partir de ahí, el hecho de decidir si quiere practicar sexo con su novio/marido desaparece completamente, es el hombre el que elige cuándo hacerlo y cómo. Una lógica aplastante, sin lugar a dudas.

Un enunciado como “Creemos que es correcto pegarle a la mujer, esto debe hacerse CON FRECUENCIA” era de esperar en esta página que toma a la mujer por un ser incompleto, propiedad del hombre. En varios posts, incluso la compara con los niños o con las mascotas llegando a escribir “La mujer debe ser entrenada como se entrena a las mascotas…”. Definitivamente, el que escribió eso es el nuevo Platón. En otros artículos algo más racionales habla del hombre como tutor de la mujer, puesto que la mujer no se educa en la escuela (escuela, ¿qué es eso?), no, a la mujer la educa el hombre, cuya superioridad intelectual le enseñará a esas cosas básicas en la vida como: callarse cuando él lo ordene, tener la comida siempre preparada, hablar con sus amigas cuando él lo permita, etc.

Como expertos sexuales machistas que son, los administradores también dan consejos acerca de cómo es la vida sexual de una pareja machista. En concreto, leí un post en el que explicaba que el sexo anal es el eslabón último de la dominación. A partir de ahí, la mujer es completamente sumisa y, por ello mismo, al principio se muestra algo reacia hacia el sexo anal, porque sabe que una vez suceda, ya será una verdadera licenciada en machismo. Además, añade que las feministas son unas incoherentes puesto que sus discursos son anti-masculinos (feminismo no es hembrismo, recalco) pero en la cama les gusta tener a un verdadero hombre (los demás son máquinas) que las domine, porque es vox populi que a las feministas, bajo ningún concepto, puede gustarles el BDSM.

Asimismo, los administradores como hombres y, por tanto, grandes sabios, que son saben que la participación activa de los lectores es un punto clave para que la información se retenga mejor y, por ello, de vez en cuando, publican testimonios de machistas. Así, un estrenado machista cuenta su experiencia; cómo de querer la igualdad pasó a creer en el machismo ya que (atención, si hay profesores de sociología o psicología leyendo esto, incluidlo en vuestras clases, por favor) discutía mucho con su mujer y, al final, ella acababa gritándole y él tratando de calmar la situación, hasta que un día la abofeteó para que se callara y ella se lo agradeció, ya que “lo necesitaba”. Qué romántico, una pareja descubriendo que es machista, deberían hacer una película.

Por suerte, me llevé una pequeña alegría leyendo otro post en el que les preguntaban si un hombre homosexual es inferior a un hombre heterosexual. Mi alegría comenzó al ver que los consideran iguales y se esfumó al leer “la preferencia sexual de una persona no tiene que ver con sus capacidades, el género si”.

Además, complementan sus escritos con imágenes de dominación o de mujeres machistas que, básicamente, muestran con carteles que son inferiores a los hombres, incluso a los humanos en general.

También cuentan con todo un listado de castigos con los que someter a la mujer en caso de que muestre algo de rebeldía (modo los 10 mandamientos) y en los que figuran frases como “Prohibición de ciertas comidas. (Dulces o carbohidratos de noche)”, “Prohibición de salir a la calle o conversar con amigas”, “Irse a dormir antes de su hora”o “Recibir orina”. Ese último quiero que alguien me lo explique, porque no quiero ni detenerme a pensar a qué se refieren exactamente. Tras esto a la conclusión a la que llego es que hay animales que viven mejor que las mujeres machistas.

Si me pusiera a criticar cada apartado de esta página batiría el récord Guinness de “Post más largo”, por lo que, voy a terminar de despotricar ya. Por último, quiero añadir una frase de uno de esos testimonios de machistas: “Pensar que la verdad de la superioridad masculina sobre la femenina es tan simple y tan contundente y sin embargo nos han puesto el grotesco árbol de la igualdad delante de los ojos y no podemos ver el frondoso y riquísimo bosque que nos marca la misma naturaleza…” No sé dónde estudió biología esta chica, pero yo lo único que veo es que lo natural es que tanto hombres como mujeres tengan dos ojos, dos manos, dos piernas y una cabeza. Y, desde aquí, un mensaje para todas aquellas mujeres machistas: La cabeza usadla para pensar no para asentir, las manos empleadlas para quitaros las cadenas no para cocinarle a vuestro macho  y las piernas para correr lejos de hombres así.

Y para los administradores de la página y todos esos que les han hecho alcanzar las 155,900 visitas solo tengo dos cosas que decirles: La persona más inteligente del mundo es Marilyn vos Savant y, como he visto que cometéis tantas faltas de ortografía, yo podría echaros una mano para que os desempeñéis mejor en esa tarea, que un filósofo sin un buen discurso no sirve para nada, pero como soy mujer, igual os incomoda un poco la idea de que os enseñe alguien que es inferior a vosotros por naturaleza. Además, soy feminista, luego podéis quemarme si queréis.

Y a vosotros, mis queridos lectores, lo único que os pido es que firméis la petición de change.org para que esta página sea eliminada. ¡Muchas gracias! (Link: Eliminar “Dominación machista”)

Donald Trump, sinónimo de misoginia

El más polémico de los candidatos a la presidencia de Estados Unidos es Donald Trump, sin duda. Un magnate con aspiraciones a convertirse en presidente que apunta a lo más alto en las encuestas precisamente por su actitud políticamente incorrecta.

Por lo general, su nombre resuena en los medios de comunicación por su xenofobia y su desprecio por personajes respetados y admirados de la sociedad estadounidense. Comenzó su campaña electoral atacando a la minoría hispana del país para después insultar al “héroe de guerra” John McCain o al expresidente George Bush.

Esto, que en un principio puede resultar atractivo para algunos de los sectores conservadores estadounidenses, está llegando a un punto en el que parece que el multimillonario no tiene consideración por nadie y que, además, no se siente culpable.

Una de las últimas polémicas protagonizadas por Trump fue su afirmación de que las mujeres que abortasen debieran de sufrir algún tipo de castigo. Considerando que desde su legalización en 1973 hasta el año 2013 se han llevado a cabo alrededor de 56 millones de abortos en el país, la idea de Trump fue un ataque directo hacia un gran número de mujeres. Esto es una muestra más de lo que, hace poco, comentaba el periodista Franklin Foer: “Trump se considera a sí mismo un ejemplo tan grande de virilidad masculina como para actuar de árbitro en última instancia de la feminidad.”

Gracias a estas terribles afirmaciones y otros sucesos machistas protagonizadas por el mismo, su nombre ha ido degradándose poco a poco y ha perdido apoyos entre los suyos. Muchos republicanos aún no le han perdonado su trato deplorable para con una de las presentadoras más famosas de la cadena Fox, Megyn Kelly, cuando hace un año acudió a un debate que ella moderaba y respondió a sus preguntas acerca de su política con que le “brotaba sangre de todos lados”; réplica que la gente interpretó como una insinuación a cambios hormonales provocados por la menstruación. Anteriormente, Trump ya la había criticado por Twitter pidiendo a sus simpatizantes que no vieran su programa pues siempre hablaba de él con un tono muy duro.

Tampoco puede olvidarse el suceso acontecido en 2011, cuando una de sus abogadas pidió un receso para amamantar a su bebé y éste le respondió con insultos.

Estos son, quizás, los ejemplos más coherentes protagonizados por Trump dentro de la incoherencia del machismo. Pero, existen otros acontecimientos ante los que uno no sabe si reír o llorar. Entre ellos figura su sentencia de que Carly Fiorina es demasiado fea como para ser presidenta o su afirmación hace unos años en la radio de que, si pudiera, se acostaría con la difunta Lady Di pues la considera físicamente perfecta a pesar de que estuviese loca.

El más sonado de ellos fue la imagen que publicó en su cuenta de Twitter el 23 de marzo para desestimar a su rival político Ted Cruz. En ella se mostraba a Heidi Suzanne Nelson, la esposa de Ted Cruz, y al lado a la modelo Melania Trump, esposa del magnate. En la foto figuraba el mensaje “Una imagen vale más que mil palabras”. ¿Qué quería transmitir con esto Trump? ¿Que es más apto para acceder a la Casa Blanca que Cruz solo por tener una esposa que considera más bella?

Lo extraño y repugnante del caso es que hay gente que le respalda y que apoya estas opiniones superficiales y machistas de las que hace alarde, como los casi 10 mil retweet’s que tiene esta fotografía en Twitter. Es increíble que haya personas que estén de acuerdo con llevar a alguien carente de respeto y ética a la presidencia. Puede que muchos se rían ante sus ocurrencias y su actitud espontánea y agresiva, pero los estadounidenses deben ser conscientes de que este hombre podría gobernar el país más fuerte del mundo durante 4 años.

Lo más sorprendente de todo es que en un país se permita que alguien así siga haciendo campaña electoral y que opte a ser presidente al despreciar a aquellas que son casi la mitad de la población de su país. La democracia debe otorgar libertad a todos pero, ante todo, debe subordinarse a los derechos humanos pues siguen siendo las dos caras de la misma moneda. Sin derechos humanos no hay democracia… Y en la Declaración Humana de Derechos Humanos no hay cabida para la xenofobia o la misoginia.